Masculinización facial

Duración

de 12 a 18 meses

Hospitalización

no requerida

Crema

anestésica

Recuperación

inmediata

Resultados

inmediatos

Tiempo

1 hora

Financiación

hasta 24 meses sin intereses

Belleza, simetría, armonía… No son características exclusivas del rostro femenino. La masculinización facial es un conjunto de técnicas que se emplean para realzar los rasgos del hombre, con el objetivo de resaltar sus rasgos más masculinos, siempre en busca del equilibrio.

Masculinización facial: antes y después

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Qué es la masculinización facial

Cada vez más hombres desean una versión más fresca y rejuvenecida de su rostro. Desde eliminar las arrugas del tercio medio superior (frente, entrecejo y patas de gallo) hasta el aumento de la barbilla y redefinición y equilibrio mandíbular.

Con la masculinización facial trabajaremos principalmente el ángulo mandibular y el mentón.

Mandíbula

La línea de la mandíbula masculina es ancha y bien definida con un gran volumen masetero, lo que le da una apariencia más cuadrada. Desde la vista frontal, la angulación de la rama mandibular es prominente y debe estar en línea (horizontalmente) con las comisuras de la boca. La cara masculina también tiene un ángulo mandibular más bajo en comparación con la cara femenina en la vista de perfil. La mayoría de los hombres son romos en el ángulo de la mandíbula, en parte debido al adelgazamiento de la almohadilla de grasa temporal-bucal. En esta área, los rellenos dérmicos deben inyectarse supraperiósticamente. Este tratamiento proyectará la mandíbula lateralmente y fortalecerá la línea de ésta, dando como resultado una mandíbula cuadrada que es deseable en un hombre.

Al aplicar el tratamiento es importante respetar las proporciones faciales.

Mentón

En los hombres, el borde lateral del mentón debe correlacionarse con una línea vertical caída desde la esquina de la boca. En la vista de perfil, una línea que conecta la porción más prominente del labio superior e inferior debe tocar la línea de Riedel. El labio inferior debe ser 2-3 mm posterior al labio superior y el pogonión nunca debe proyectarse más allá de esta línea. Podemos alargar el mentón o mejorar su proyección anterior con rellenos dérmicos. Aumentar la proyección hacia adelante del mentón también ayudará a tensar la piel alrededor del área de la mandíbula. Los bordes laterales de la barbilla también se pueden mejorar, lo que daría como resultado una barbilla más cuadrada, además de agregar definición a la línea de la mandíbula.

Pómulos

La redefinición de pómulos con rellenos dérmicos es muy popular entre la clientela femenina en estética. Sin embargo, para los pacientes masculinos, esta es un área a mejorar pero sin poner demasiado volumen para no dotarle de un aspecto afeminado. Las mejillas masculinas son más planas pero más anguladas en comparación con las femeninas. Los estudios de resonancia magnética han demostrado que, si bien las mujeres tienen un compartimento adiposo subcutáneo 1,5 veces más grueso medialmente, los pacientes masculinos tienden a tener una distribución uniforme. El ápice de las mejillas también es más bajo y sutilmente definido.

En la primera consulta gratuita de valoración, el doctor estético valorará si el paciente precisa trabajar una, dos o las tres áreas claves en el proceso de masculinización facial para lograr los mejores resultados.

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